1. Lo aplicas sobre piel seca

El error número uno (que todos hemos cometido) es aplicar el suero sobre piel seca. Esto se debe a que el ácido hialurónico necesita aplicarse sobre una superficie con agua para poder penetrar la piel, jalar la humedad hacia la dermis, hidratar y crear ese efecto “plumpy" o “rellenito”. Aplica una bruma facial antes y después del suero para hidratar con intensidad. 

2. Lo usas 24/7

Hidratar la piel es importante, pero también es esencial darle otros ingredientes y nutrientes que necesita para estar luminosa y sana. Puedes variar entre mañana y noche, o hacer layering con más productos (punto número cuatro), lo que tu prefieras. Solo no lo uses de forma exclusiva 24/7.

Este punto aplica para cualquier rutina de skincare, da igual cuántos pasos o productos tenga. La crema funciona como una barrera que sella todos los productos que aplicaste anteriormente para que puedan seguir actuando a lo largo del día. También funciona como una capa extra de protección para la suciedad y la contaminación. Si tienes piel grasa, utiliza un hidratante en gel, pero no te lo saltes.

4. No esperas antes de mezclarlo

Claro que puedes utilizarlo antes o después de otros ingredientes activos, como el retinol o los alfa hidroxiácidos, lo importante es que esperes mínimo 10 minutos entre cada aplicación. Este tiempo evitará que los ingredientes se desestabilicen o neutralicen. Recuerda que el orden de aplicación es: primero los productos más ligeros, después los más espesos. Si ambos tienen la misma consistencia, el ácido hialurónico va a al final.

Si quieres invertir, invierte. Pero toma en cuenta que hay una gran selección accesible de productos con ácido hialurónico que funcionan igual de bien (o mejor). Si vas a gastar en un suero de lujo, investiga antes para asegurarte de que valdrá cada peso.

________Fuente: ELLE